En redes sociales se habla mucho de RELACIÓNES TÓXICAS, pero ¿sabes cómo identificar cuando una relación se está deteriorando?
¿Estás pasando por un momento difícil en tu relación?
En consulta escucho frecuentemente que las personas me preguntan: “¿es normal esto que nos pasa a mi pareja y a mí?”.
En realidad creo que la cuestión más importante sería: ¿es funcional tu relación de pareja?; es decir, qué tanto aporta ésta a tu crecimiento personal y calidad de vida.
A pesar de que puedan haber peleas o malos entendidos, si has elegido compartir tu vida con alguien más, vale la pena esforzarse por hacerlo de manera armónica.
Una relación, más que causar peleas; debe servir para complementar las virtudes y defectos uno del otro.
Quiero aclarar que una relación de pareja sana no es aquella en la que nunca hay discusiones; de hecho, considero que esto es casi imposible.
No obstante, la clave está en cómo se resuelven esos conflictos.
La manera en que una pareja aborda sus diferencias nos puede indicar el estado de la relación, ya que, si uno o ambos integrantes perciben frecuentemente que no tienen la oportunidad de ser escuchados y tomados en cuenta, aún después de la reconciliación, sería conveniente que reflexionaran sobre algunos aspectos que podrían mejorar, por lo cual abordaré tres puntos que estimo que podrían ser de gran utilidad.
3 claves fundamentales de una relación de pareja sana
1.- Confianza
Lo primero es trabajar la confianza, la cual se va construyendo desde los inicios de la relación.
Es un tema significativo, ya que es muy difícil ganarla y fácil de perder.
No obstante, tampoco es imposible recuperarla en caso de que surja una crisis. ¿Cómo se puede generar un clima de confianza en la pareja?
Es indispensable que cada miembro decida otorgar libremente al otro integrante de la relación, ya que, si no hay esta disposición, nada de lo que haga la otra persona será suficiente.
También es cierto que hay acciones concretas que puedes realizar para construir esta virtud con la persona que has elegido; para esto es indispensable cumplir con tus compromisos y promesas, ya que, de esta manera, se genera seguridad en la otra persona.
Independientemente del aspecto moral, para una tranquilidad mental es conveniente ser lo más sincero con tu pareja, ya que las mentiras, por pequeñas que puedan parecer, tienden a representar una carga emocional, y al ser descubiertas suelen provocar serias dudas respecto a la relación.
2.- Sé asertivo
Aunado a lo anterior, una herramienta muy valiosa para una buena comunicación es
la asertividad. ¿A qué se refiere este estilo de comunicación?
Es la capacidad para expresar y defender de manera clara tus ideas y necesidades.
Por supuesto, esta habilidad debe ir ligada a la empatía para poder realizar un diálogo con respeto.
La persona asertiva sabe que puede estar equivocada, pero mantiene la calma para escuchar al otro y formular sus ideas, con la finalidad de llegar a un entendimiento.
Esta es una de las habilidades que más se le dificulta a las personas al principio, pero con práctica y perseverancia, es posible convertirla en un hábito y mejorar considerablemente la calidad de vida.
3.- Evita la dependencia emocional
Finalmente, al ir desarrollando las estrategias antes mencionadas, cada miembro de la pareja deberá esforzarse por asumir la responsabilidad de su estado emocional; es decir,
cada uno es responsable de su propia felicidad.
Indudablemente, el apego a la pareja es un aspecto sano y positivo, pero es necesario evitar la dependencia emocional, ya que esto puede generar sentimientos de celos o intentos de culpabilizar al otro si éste no se encuentra siempre disponible para atender a las necesidades personales de su compañero..
Aunque pueden existir otros aspectos como pasar tiempo de calidad con tu pareja y respetar sus tiempos y espacios; considero que estos son los tres pilares principales que te ayudarán a hacer que la relación con tu pareja dure mucho tiempo.
Tomando en cuenta lo anterior, ¿estás cuidando que tu relación sea funcional?
Si descubres que necesitas trabajar en estos aspectos, ¡es importante que no te desanimes!
Con la disposición y perseverancia suficientes, podrás observar mejoras significativas, ¡es cuestión de práctica!
No esperes que tu pareja dé el primer paso, todo cambio empieza por uno mismo, y puedo asegurarte que el ejemplo personal convence mucho más que los reproches.
Empieza hoy mismo tu relación de pareja sana, ¡ánimo!
LLAMAR A PSIC. DANIEL |